viernes, 10 de noviembre de 2017

Made by swing

Están ahí, en nuestros barrios, en nuestras calles, las vemos día sí día también, ya sea al ir a comprar el pan o al bajar la basura. Ellas siempre están ahí, nos observan desde su posición dominante al borde de la acera. Saben que las miramos, que las observamos desde la distancia, se dan perfecta cuenta de cómo nuestros ojos recorren cada una de sus curvas y de que soñamos con acercarnos para, por un segundo, parar el tiempo y sentir que son nuestras.



Están hechas de otra pasta, cada elemento que la forma ha sido cuidadosamente elegido, cada detalle forma parte de un todo único con un propósito determinado, son máquinas en constante evolución, un trabajo nunca terminado, en constante cambio, pero maravilloso en cada uno de sus capítulos.

Basándome en los principios de coger una moto y destriparla para hacerla propia, única y personal y bajo la exclusiva premisa del 'hand made', creo una nueva sección denominada Made by swing en la que incluiré todas esas motos con alma. Motos construidas poco a poco con la pasión desbordante de sus propietarios. Motos que emanan pasión y estilo por todos sus tornillos.

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